Perfil
La Virgen de los Pescadores, también conocida como Stella Maris, se encuentra en la falda del Cerro San Antonio, y es uno de los monumentos más emblemáticos de Piriápolis. Esta estatua fue colocada por el fundador del balneario, Francisco Piria, quien la promocionaba como uno de los principales atractivos turísticos de la ciudad. La virgen fue inaugurada entre 1916 y 1919, y en este mismo lugar Piria colocó la piedra fundamental de Piriápolis, marcando el inicio de la ciudad que conocemos hoy.
La imagen de Stella Maris, mirando hacia el mar, se erige como símbolo de protección para los pescadores locales, quienes desde entonces le rinden tributo. Su posición estratégica ofrece una vista inigualable de la bahía, convirtiéndola en un sitio tanto de fe como de belleza natural.
Un Lugar para Disfrutar los Mejores Atardeceres
Además de su significado religioso e histórico, el lugar es famoso por ofrecer algunos de los mejores atardeceres de Piriápolis. Desde su ubicación privilegiada, se puede contemplar cómo el sol se sumerge en el mar, iluminando el horizonte con una paleta de colores que atrae a turistas y fotógrafos por igual.
Acceso y Recomendaciones
Si planeas visitar la Virgen de los Pescadores en auto, es importante que sepas que los lugares para estacionar son limitados, especialmente durante la temporada alta. Para quienes disfrutan de caminar, hay un camino de piedras que asciende desde la Rambla de Piriápolis hasta el cerro. Aunque es un sendero empinado, el esfuerzo se ve recompensado con vistas espectaculares y la serenidad del entorno.
Una vez en la cima, la tranquilidad del lugar y las vistas panorámicas te invitan a relajarte y disfrutar de un momento de conexión con la naturaleza y la historia del balneario. La combinación del aire puro, la paz del entorno y la vista del mar es una experiencia que no te puedes perder.
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